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Introducción: La épica medieval como expresión literaria
Como se ha desarrollado en el artículo anterior sobre la lírica tradicional medieval, la sociedad de la Edad Media se caracterizó por una rigurosa división estamental que determinó tanto la organización política como la producción cultural de la época. En ese contexto de oratores, bellatores y laboratores, surge la épica medieval como expresión literaria directamente vinculada a los ideales aristocráticos y caballerescos.
La épica medieval constituye el género narrativo por excelencia de la nobleza feudal, reflejando sus valores, aspiraciones y cosmovisión. Frente a la lírica tradicional, que expresaba los sentimientos del pueblo llano, la épica medieval se convierte en el vehículo literario que ensalza las hazañas bélicas y las virtudes caballerescas de los bellatores, legitimando su posición dominante en la sociedad feudal.
Los cantares de gesta: características y función social
Los cantares de gesta constituyen las manifestaciones más importantes de la épica medieval europea. El término “gesta” deriva del latín y significa “hazaña” o “hecho”, denominación que revela su contenido fundamental: la narración de las grandes gestas de héroes que encarnan los valores de su tiempo.
Características generales de los cantares de gesta
Los cantares de gesta presentan una serie de rasgos distintivos que los definen como género literario específico de la Edad Media:
- La temática heroica constituye su elemento central. Estos poemas narran las aventuras bélicas de un héroe perteneciente a la nobleza, que representa las virtudes caballerescas y, haciendo gala de ellas, lucha para restaurar un orden social quebrantado. El héroe épico encarna los ideales de honor, lealtad, valentía y servicio a Dios y al señor.
- La transmisión oral caracterizó inicialmente estos poemas. Los juglares eran los encargados de difundir estas composiciones de castillo en castillo, de plaza en plaza, recitándolas de memoria ante un auditorio que incluía tanto a nobles como a plebeyos. Esta transmisión oral favoreció la existencia de múltiples variantes de una misma obra y permitió su adaptación a diferentes contextos geográficos y temporales.
- La estructura métrica se basa en versos largos de medida irregular, generalmente entre doce y dieciséis sílabas, divididos por una cesura o pausa intermedia que separa cada verso en dos hemistiquios. Los versos se agrupan en tiradas o series de extensión variable unidos por la misma rima asonante. Esta estructura facilitaba la memorización y la recitación pública.
- Los recursos estilísticos incluyen abundantes paralelismos, epítetos épicos (fórmulas fijas que caracterizan a los personajes), apelaciones al auditorio y fórmulas de transición que permitían al juglar organizar su recitación. Estos elementos revelaban el carácter oral primigenio de estas composiciones.
Función social y cultural
Los cantares de gesta cumplían una función múltiple en la sociedad medieval. Por un lado, servían como instrumento de propaganda que reforzaba la estructura social feudal al ensalzar los valores de la nobleza dominante. Por otro lado, constituían uno de los pocos medios de entretenimiento y difusión cultural en una sociedad mayoritariamente iletrada.
Estos poemas funcionaban como vehículos de identidad colectiva, creando una conciencia nacional o regional a través de la exaltación de héroes locales que representaban las virtudes del pueblo. La épica medieval refleja el afán de los pueblos europeos por crearse una identidad propia, simbolizada por sus héroes antiguos.
La dimensión didáctica constituía otro aspecto fundamental. Los cantares de gesta transmitían modelos de comportamiento, enseñando a través del ejemplo heroico los valores que debían regir la conducta caballeresca: la fidelidad vasallática, el valor en el combate, la clemencia con el vencido, la protección de los débiles y la defensa de la fe cristiana.
La épica castellana medieval
La épica castellana presenta características específicas que la diferencian de las tradiciones épicas francesa, germánica o italiana. La escasez de testimonios conservados —apenas cuatro cantares de gesta completos o fragmentarios— contrasta con la abundancia de la épica francesa. Sin embargo, esta escasez se compensa con testimonios indirectos de gran importancia: las prosificaciones en crónicas y la pervivencia de elementos épicos en el romancero.
El realismo histórico constituye un rasgo distintivo de la épica castellana. Frente a las elaboraciones fantásticas de otras tradiciones épicas europeas, los cantares castellanos se inspiran en hechos históricos relativamente recientes y presentan personajes que existieron realmente, aunque idealizados y embellecidos por la tradición poética.
La perspectiva social de la épica castellana refleja el espíritu de frontera propio de la Reconquista. Los héroes épicos castellanos no pertenecen necesariamente a la alta nobleza, sino que pueden representar la pequeña nobleza o incluso sectores de la sociedad que buscan el ascenso social a través del mérito personal y las hazañas bélicas.
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Hola. Soy Víctor Villoria, profesor de Literatura actualmente en la Sección Internacional Española de la Cité Scolaire International de Grenoble, en Francia. Llevo más de treinta años como profesor interesado por las nuevas tecnologías en el área de Lengua y Literatura españolas; de hecho he sido asesor en varios centros del profesorado y me he dedicado, entre otras cosas, a la formación de docentes; he trabajado durante cinco años en el área de Lengua del Proyecto Medusa de Canarias y, lo más importante he estado en el aula durante más de 25 años intentando difundir nuestra lengua y nuestra literatura a mis alumnos con la ayuda de las nuevas tecnologías. Ahora soy responsable de esta página en la que intento seguir difundiendo nuestra literatura. ¡Disfrútala!
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