Los dos, buenos pilotos del aire, subiríamos
sobre los aviones del sueño, al alto soto
de la gloria, y al mundo, celestes, bajaríamos
e! mirto y el laurel, la palmera y el loto.
Descender ya —¡qué dulce!, ¡los héroes!— coronados
por los súbitos lampos, sobre el carro del trueno,
con estrellas los jóvenes pechos condecorados
al mar de nuestra vida, ya esmeralda v sereno.
Y recordar al toque final de la retreta
la clara faz del alba, su voz hecha corneta
de cristal largo y fino, en la antigua mañana
que zarpamos del mundo sobre la crin del viento
y entramos en los cielos del estremecimiento
bajo los gallardetes rosados de la diana.
Marinero en tierra, 1925
Autor del audio: Núria Espert
Fuente: Cecilia
Ángel González. Discurso a los jóvenes
marzo 11, 2024
Unamuno. En mi cuadragésimo sexto cumpleaños
octubre 13, 2024
Gamoneda. Invierno
febrero 28, 2024
Lorca. Baladilla de los tres ríos.
febrero 28, 2024
Cortázar. Después de las fiestas
septiembre 23, 2024
José Ángel Valente. Serán ceniza.
julio 7, 2023