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Texto argumentativo número 1
Préciate [Sancho] más de ser humilde virtuoso que pecador soberbio. Innumerables son aquellos que de baja estirpe nacidos, han subido a la suma dignidad pontificia e imperatoria; y desta verdad te pudiera traer tantos ejemplos, que te cansaran. Mira, Sancho: si tomas por medio a la virtud, y te precias de hacer hechos virtuosos, no hay para qué tener envidia a los que los tienen príncipes y señores; porque la sangre se hereda, y la virtud se aquista, y la virtud vale por sí sola lo que la sangre no vale.
Miguel de Cervantes: El ingenioso hidalgo don Quijote de la Mancha
Texto argumentativo número 2
El analfabetismo numérico y el 2000
Hay muchos “analfabetos” numéricos en nuestra sociedad. Y eso no es tan malo como ser analfabeto, pero es muy malo. No debe de ser fácil acabar con este analfabetismo numérico, pues se da en casi todos los países, pero, sin duda, más difícil ha debido ser reducir el analfabetismo a los mínimos actuales. Y, ¿qué se ha hecho para ello? Ha habido dos campos de actuación fundamentales: el político […] y el escolar […]. De la misma forma, para combatir el analfabetismo numérico se debe trabajar en dos direcciones: la primera, la denuncia en los foros políticos y en los medios de comunicación de este problema. La erradicación de los ambientes pseudointelectuales de frases como: “es que como soy de letras…”. La segunda dirección es la escolar. Minimizar el analfabetismo numérico debe ser el objetivo principal del estudio de los números en la enseñanza obligatoria.
Soledad Rodríguez Salazar, en “El País”, 12 de julio de 1999
Texto argumentativo número 3
El Quijote, cuyo protagonista es un lector, es la primera novela de la Historia, y sigue siendo la mejor. ¿Por qué leer El Quijote? Porque, como dijo Unamuno, que sigue siendo el mejor crítico del libro, es mucho más que una novela; por la personalidad y profundidad extraordinaria de don Quijote y Sancho, que también son mucho más que unos personajes, son figuras llenas de energía, pasión, vida e inteligencia.
Eduardo Lago (entrevista a Harold Bloom), en “El País Semanal”, 6 de agosto de 2000 (adaptación)
Texto argumentativo número 4
Si supieras todo, verías que la retórica abarca, por decirlo así, la virtud de todas las otras artes. Voy a darte una prueba muy convincente de ello. He ido a menudo con mi hermano y otros médicos a ver enfermos que no querían tomar una porción o tolerar que se les aplicara el hierro o el fuego. En vista de que el médico no conseguía nada, intenté convencerlos sin más recursos que los de la retórica, y lo conseguí. Añado que si un orador y un médico se presentan en una ciudad y que se trate de una discusión de viva voz ante el pueblo reunido o delante de cualquier corporación acerca de la preferencia entre el orador y el médico, no se hará caso ninguno de este, y el hombre que tiene el talento de la palabra será escogido, si se propone serlo.
Platón: Gorgias