Cernuda. Donde habite el olvido

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By Víctor Villoria

Donde habite el olvido

Donde habite el olvido,
en los vastos jardines sin aurora;
donde yo sólo sea
memoria de una piedra sepultada entre ortigas
sobre la cual el viento escapa a sus insomnios.

Donde mi nombre deje
al cuerpo que designa en brazos de los siglos,
donde el deseo no exista.

En esa gran región donde el amor, ángel terrible,
no esconda como acero
en mi pecho su ala,
sonriendo lleno de gracia aérea mientras crece el tormento.

Allí donde termine este afán que exige un dueño a imagen suya,
sometiendo a otra vida su vida,
sin más horizonte que otros ojos frente a frente.

Donde penas y dichas no sean más que nombres,
cielo y tierra nativos en torno de un recuerdo;
donde al fin quede libre sin saberlo yo mismo,
disuelto en niebla, ausencia,
ausencia leve como carne de niño.

Allá, allá lejos;
donde habite el olvido.

El poema

En este poema se percibe una visión profundamente dolorosa del amor, marcada tanto por la experiencia personal del poeta como por los rasgos propios del Romanticismo.

Elementos autobiográficos

El poema refleja una vivencia de desamor y soledad. El “yo” poético expresa el deseo de desaparecer y de dejar de ser, como si fuera una piedra olvidada entre ortigas, símbolo de la anulación de la identidad tras el fracaso amoroso. Se manifiesta un anhelo de que el deseo desaparezca y de que el propio nombre se disuelva en el tiempo, lo que muestra el dolor y la incapacidad de encontrar consuelo tras la pérdida. El poeta busca refugio en la ausencia y el olvido, como única forma de liberarse del sufrimiento.

Rasgos románticos

El poema está lleno de características propias del Romanticismo:

  • Exaltación del sentimiento y el dolor amoroso: El amor aparece como una fuerza destructiva, un “ángel terrible” que hiere y atormenta al poeta.
  • Búsqueda de evasión y anhelo de disolución: El deseo de desaparecer, de ser solo un recuerdo o de disolverse en la niebla y la ausencia, refleja la aspiración romántica de escapar del sufrimiento a través del olvido o la muerte simbólica.
  • Naturaleza como reflejo del estado de ánimo: Los “vastos jardines sin aurora” y la atmósfera de soledad y vacío refuerzan la sensación de pérdida y desarraigo.
  • Dualidad amor/olvido, vida/muerte: El poema contrapone el amor, fuente de tormento, con el olvido, visto como liberación y descanso, retomando la tensión romántica entre pasión y muerte.

En conjunto, “Donde habite el olvido” es una expresión poética del dolor ante la pérdida amorosa y, al mismo tiempo, una obra que recoge los grandes temas del Romanticismo: la exaltación del sentimiento, la búsqueda de evasión y la identificación entre naturaleza y estado anímico.

Autor

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    Hola. Soy Víctor Villoria, profesor de Literatura actualmente en la Sección Internacional Española de la Cité Scolaire International de Grenoble, en Francia. Llevo más de treinta años como profesor interesado por las nuevas tecnologías en el área de Lengua y Literatura españolas; de hecho he sido asesor en varios centros del profesorado y me he dedicado, entre otras cosas, a la formación de docentes; he trabajado durante cinco años en el área de Lengua del Proyecto Medusa de Canarias y, lo más importante he estado en el aula durante más de 25 años intentando difundir nuestra lengua y nuestra literatura a mis alumnos con la ayuda de las nuevas tecnologías. Ahora soy responsable de esta página en la que intento seguir difundiendo nuestra literatura. ¡Disfrútala!

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